Kids Pet To Dry, unicornio

PROBLEMA : Es siempre un gran reto preguntarles a los niños: “¿Te lavaste las manos?” Puede ser una difícil tarea constante. ¿Por qué los niños tienen tal aversión para lavarse las manos? Tal vez nunca sepas la respuesta pero…

SOLUCIÓN: Nunca tendrás que volver a pedirlo cuando tengas la toalla para manos Pet to Dry de Norwex colgada en tu baño o cocina. Fomenta los buenos hábitos y haz que lavarse las manos sea divertido para tus niños con estas adorables toallas de manos de microfibra con formas de animales. 

• Colgar de un gancho o de la perilla de la puerta
• Puede colgarse de los mangos de la carriola de los niños
• No debe utilizarse como juguete

• Los adorables motivos de animales les encantarán a los niños y niñas de todas las edades.
• La suave felpilla de microfibra seca las manos rápidamente.
• La Microfibra Norwex tiene la capacidad de eliminar hasta un 99% las bacterias de las superficies cuando se siguen las instrucciones de cuidado y uso.
• Su práctica asa permite colgarla donde sea
• Seca rápidamente así que estará lista para volver a usarse 
• El BacLock® en la toalla, nuestro agente antibacterial con micropartículas de plata, trabaja para autopurificarse y para inhibir el mal olor producido por bacterias y la formación de moho y hongos en un lapso de 24 horas, así que estará listo para volver a usarse.
• Apto para lavarse en lavadora

• Muchas enfermedades y condiciones de salud se difunden por no lavarse las manos. Lavarse las manos regularmente es una de las mejores formas de prevenir que los gérmenes se diseminen y evitar enfermarse.
•  Enseñar a los niños a lavarse las manos a temprana edad conlleva a desarrollar buenos hábitos de por vida.
• De acuerdo a un estudio realizado por Michigan State University, el 95% de las personas no se lava las manos el tiempo suficiente para matar las bacterias dañinas después de usar el baño. Sólo una de tres personas utiliza jabón.
• Es recomendable lavarse las manos vigorosamente utilizando jabón y agua por 15 o 20 segundos, o por el tiempo que lleva cantar el “Happy Birthday” dos veces.